La otoplastía es un procedimiento muy sencillo que muchas personas no saben es posible realizar. Básicamente su propósito es ayudar a aquellas personas que tienen orejas muy prominentes al permitirnos mejorar el contorno y la proyección de la oreja para hacerlas más armónicas con el rostro.
La otoplastía permite corregir el contorno de las orejas de una manera sencilla y segura.
Las personas que tienen orejas muy prominentes usualmente presentan uno de dos problemas, un exceso de cartílago en la zona de la oreja conocida como “La concha auricular”, o la falta de un doblez normal en la parte más externa de la oreja, “El Antehelix”. Estas alteraciones, ya sea por si mismas o en conjunto causan que la oreja se proyecte mucho más hacia los lados y miren hacia el frente en lugar de hacia los lados.
Para corregirlo se realiza un procedimiento menor, usualmente en el consultorio, en el cual se corrigen estos dos problemas mediante una pequeña incisión en la parte posterior de la oreja, y posteriormente se debe usar una banda para protegerse por un par de semanas. Los resultados suelen ser excelentes y pueden cambiar drásticamente la percepción personal de los pacientes.
Curiosamente es un procedimiento que se solicita mucho en niños y adolescentes, especialmente para que no sufran de “bullying” en la escuela, pero debemos estar conscientes de que es un procedimiento que se debe realizar hasta después de los 6 o 7 años de edad de los niños, que es cuando la oreja se encuentra casi totalmente desarrollada.
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